Día 147 l Proverbios 10:23–25
צַדִּיק (tsaddíc) Justo
23 Como diversión es para el necio el hacer maldad,
y la sabiduría lo es para el hombre de entendimiento.
24 Lo que el impío teme vendrá sobre él,
y el deseo de los justos será concedido.
25 Cuando pasa el torbellino, ya no existe el impío,
pero el justo tiene cimiento eterno.
3 enseñanzas:
- El malvado se deleita en su perversidad. Le justo se delita en la búsqueda de la verdad. Cuando naces de nuevo hay un deseo por conocer más de Dios.
- El Señor hará justicia.
- Caminar en justicia traerá su recompensa.
Charles Bridges: Pero incluso, sin ir tan lejos, ¿no deberíamos guardarnos de las bromas maliciosas, que tienden a herir el carácter del prójimo o a causarle malestar? ¿Somos lo suficientemente cuidadosos en no complacer nuestro ingenio o humor a sus expensas? Todo esto no solo es cobarde, sino también contrario a la sobriedad y la gravedad de la profesión cristiana. Es el puro y natural egoísmo del corazón humano. ¿No debería también estar el juego de los niños a veces bajo control? Los jóvenes no suelen ser muy disciplinados en reflexionar y considerar a los demás. Nunca dejes que la alegría de espíritu los lleve a hacer una diversión de lo que debería suscitar simpatía y ternura.
- Cuando yo era ateo sospechaba que el cristianismo fuese verdad, y si es cristianismo era verdad, estaba en graves problemas.
Los salmos imprecatorios son un conjunto de salmos en el libro de los Salmos de la Biblia que contienen expresiones de maldición, venganza y juicio hacia los enemigos del salmista. Estos salmos han generado reflexiones y debates a lo largo de la historia sobre su naturaleza y su lugar en la adoración y la vida espiritual. A continuación, mencionaré algunas reflexiones clásicas sobre los salmos imprecatorios:
- Contexto histórico: Algunos estudiosos argumentan que los salmos imprecatorios deben ser entendidos en su contexto histórico y cultural. En el antiguo Israel, las maldiciones y expresiones de juicio hacia los enemigos eran comunes en los lamentos y en las oraciones por justicia. Estos salmos reflejarían las circunstancias específicas y los sentimientos de los salmistas en tiempos de adversidad y opresión.
- Expresiones emocionales y honestidad ante Dios: Los salmos imprecatorios son considerados por muchos como ejemplos de la honestidad y la sinceridad emocional del salmista ante Dios. A través de estas expresiones, los salmistas presentan sus sentimientos de ira, frustración y deseo de justicia a Dios, confiando en que Él escuchará y actuará en su tiempo y manera adecuados.
- Limitaciones del Antiguo Testamento: Algunos teólogos argumentan que los salmos imprecatorios deben ser entendidos a la luz del Antiguo Testamento y que no reflejan completamente la revelación y la enseñanza de Jesucristo en el Nuevo Testamento. Consideran que los salmos imprecatorios son una expresión legítima pero limitada de la relación con Dios en el antiguo pacto, antes de la plena revelación de la gracia y el perdón en Cristo.
- Interpretación mesiánica: Otros enfoques sugieren una interpretación mesiánica de los salmos imprecatorios. Consideran que algunos de estos salmos, como el Salmo 69, pueden ser entendidos como profecías y prefiguraciones de la vida y la obra de Jesucristo. Según esta perspectiva, los salmos imprecatorios deben ser leídos a través del prisma de la obra redentora de Cristo y su enseñanza sobre el amor, el perdón y la reconciliación.
- Reinterpretación espiritual: Algunos teólogos han propuesto una reinterpretación espiritual de los salmos imprecatorios. Argumentan que estos salmos pueden ser aplicados simbólicamente a las luchas espirituales y la lucha contra el pecado en la vida del creyente. En lugar de dirigir las maldiciones hacia los enemigos físicos, se pueden aplicar a las fuerzas malignas y al pecado en general.
Ejemplos de salmos imprecatorios: Salmo 137, Salmo 69, Salmo 109.
- «Cuando terminó Jesús estas palabras, la gente estaba admirada de Su doctrina, porque les enseñaba como quien tiene autoridad y no como los escribas» (Mateo 7:28s).
- ¿Dónde está la diferencia? En el caso de nuestros familiares, no podemos evitar amarlos. Hablamos de enamorarnos; es algo que nos sucede sin buscarlo; es algo que nace de las emociones del corazón. Pero en el caso de nuestros enemigos, el amor no es algo solamente del corazón; es también algo de la voluntad. No es algo que no podemos evitar; es algo que tenemos que estimularnos a hacer. Es, de hecho, una victoria sobre lo que le sucede instintivamente al hombre natural.
- Mateo 5:44- 44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
- ¿Podemos orar imprecatoriamente? Sí. Con sobriedad, porque si las oraciones imprecatorias son motivadas por emociones negativas como el resentimiento o el deseo de venganza, no estaría acorde con el amor y el perdón que Jesús promovió. Pero por ejemplo, si están alentadas a orar por la paz de una nación, valen.
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